La estrategia debe ser para reflexionar sobre los datos que el cliente ofrece a sus comunicadores. Al saber cifras, datos, porcentajes o cualquier tipo de información técnica sobre la marca, los creativos ya pueden ponerse en marcha para comenzar a crear.
Los factores claves del brief deben ser transformados en lenguaje del consumidor objetivo al momento de redactar la estrategia:
a. Objetivo → Diferenciación del Consumidores
b. Competencia → Competencia social del segmento
c. Ventaja Comparativa → Beneficio al consumidor
d. Soporte → Evidencia del Beneficio
Seleccionar con el cliente las diferentes posibilidades creativas. Sin ninguna estrategia creativa, el primer recurso al que echamos mano es el de la “corazonada” o la intuición. Claramente no es la mejor opción porque se puede acertar o no, y si es que se acierta no se tienen datos claros del porque ha sido.
Otro método más seguro es el de ir paso por paso. Este método se vale de la estrategia creativa, no se basa en gustos ni intuiciones. Consiste en que una vez que la agencia y el cliente están de acuerdo en cada uno de los puntos de la estrategia creativa, los creativos comienzan el proceso de aplicar ideas.
Así se pueden presentar ideas basadas en datos concretos, y es una forma de dar comienzo a ordenar la creatividad.
A través de los factores de su formato, buscar y encontrar ideas: “El beneficio (la propuesta al consumidor), o el producto mismo pueden ya expresar la propia idea: en cuyo caso el trabajo creativo consiste nada más que en comunicar la idea en lugar de generarla, en este caso conviene asegurarse de que la creatividad no se convierta en un estorbo.” David Bernstein, 1974.
Reconocer las buenas ideas, requiere de mucho oficio. Con el tiempo, se reconocen fácilmente las ideas triunfadoras, aunque no necesariamente deben ser deslumbrantes. Las ideas no surgen como una luz o en momentos de “iluminación” como muchos creen, sino que las grandes ideas publicitarias, se deben a la suma de esfuerzos, información, dedicación y que estén orientadas en la misma dirección.
A veces la creatividad publicitaria no es tan espectacular, al contrario, muchas veces parece obvio, tanto así, que cuando los demás la ven piensan “¿cómo no se me habrá ocurrido antes?”.
- fragmento de mi tesis -